Sueño para Misiones, encuentro con Jorge Kordi, activista social.
“El consumidor no está enterado de lo que sucede detrás de la yerba mate”
Mate sin trabajo infantil, un sueño para Misiones y para toda Argentina. La principal misión de la organización Sueño para Misiones, es erradicar el trabajo infantil de la cosecha de yerba Mate. En esta ocasión conectamos con Jorge Kordi, activista social y cofundador.
Una ONG que nació en el 2010, hace 12 o 13 años atrás. El primer impulso fue organizar bibliotecas públicas y populares, en barrios, ciudades, colonias y pueblos de Misiones, donde faltaban o no había acceso a libros.
— Fundamos 21 bibliotecas públicas con 1000 libros cada una y participamos, en un primer comienzo, en muchísimo trabajo solidario. Recibimos donaciones de Buenos Aires y las entregamos a diferentes comunidades, pero también nos dimos cuenta que era como querer tapar el sol con las manos, por el nivel de pobreza que viven algunas comunidades en la provincia.
Para poder reflejar las necesidades extremas, basta decir que en ese año, en el 2010, no hace mucho tiempo y en un momento digamos de bienestar del país, tan solo en 10 meses en la provincia de Misiones fallecieron 206 niños a causa de desnutrición, por supuesto reconocido por el gobierno. Y ese es un dato que te permite evaluar la situación de vulnerabilidad de ciertos habitantes y de ciertas familias en la en la provincia.
Entonces, para poder trabajar este tema, decidimos empezar a pedir donaciones en Buenos Aires. Recibimos todo tipo de donaciones, pero nos dimos cuenta que cuanto más traíamos, más necesitábamos, y supimos que en realidad este es un trabajo que tiene que realizar el estado que tienen muchos más recursos y capacidades para hacerlo.
Por esto, pensamos que para poder cambiar las cosas, lo que necesitamos es poder educar a las personas y bueno, iniciamos nuestra actividad con las fundaciones de bibliotecas públicas.
¿Qué podemos hacer para cambiar esta realidad? ¿Cuáles son los pasos para avanzar en los procesos legales necesarios? ¿Qué planes a futuro hay y qué han hecho?
Previo a preguntarse qué podemos hacer para cambiar la realidad, hay que entender por qué la realidad es tan difícil de cambiar.
Dice Jorge:
— Yo creo que hay una serie de fuerzas que tensionan hasta estabilizarse, o sea, aquí, en este tema específico, hay interés de la industria por equilibrar, por ganar lo más posible invirtiendo lo menos posible. Hay un interés del estado, donde ponen el cambio y la energía en lo que suma votos, y no nos olvidemos que los niños/as no votan, no hacen manifestaciones, entonces no hay ninguna ganancia electoralmente hablando.
Y así podríamos enumerar los intereses de cada una de las partes que con el tiempo se han equilibrado, entonces, no hay modificaciones y a eso, a esas fuerzas equilibradas, llamamos la realidad. El consumidor no está enterado de lo que sucede detrás de la yerba mate.
La realidad es esta, este juego de tensiones que está estabilizado. Y lo que hay que hacer desde nuestro punto de vista, es desestabilizar esas fuerzas y para eso hay que colocar un nuevo actor. El actor que desequilibre la fuerza para producir cambios y transformación. El actor que nosotros creemos puede cambiar las cosas, es el ciudadano en su rol de consumidor.
¿Qué quiero decir con esto? Cuando elegimos un producto en góndola, lo que empieza a suceder es que, en el caso del giro, está premiando al productor, a la cadena de producción y de suministros que permite que ese producto llegue a la góndola; y cuando no lo compra, lo castiga de alguna manera porque le informa a la fábrica, al fabricante, que ese producto no cumple los requisitos o las necesidades del consumidor.
Si logramos que un producto en góndola tenga un sello que diga que no tiene trabajo infantil y trabajamos en la comunicación para que los consumidores, en este caso los ciudadanos en su rol de consumidor, entiendan que uno debe preferir productos que garanticen la ausencia de trabajo infantil y pobreza extrema, creo que eso podría ser un agente desestabilizador y empujar a los de las fábricas, a los productores, a transformar la forma y su cadena de suministros. Simplemente porque hay un actor dentro del esquema que está requiriendo algo que antes no requería.
Así sería una forma para nosotros de transformar esta estabilidad, esto a lo que le estamos llamando esta realidad.
Legalmente ya hay un proyecto de ley que se ha presentado en el Congreso de la Nación, para que tenga el tratamiento en las comisiones que correspondan y el debido tratamiento en la cámara para que se logre implementar.
Estamos de acuerdo en que se necesita trabajar en la comunicación, para que las personas exijan que esa implementación sea efectiva.
Nosotros a futuro, cuando esta ley haya sido tratada y aprobada, lo que pensamos es trabajar muchísimo en la comunicación para que la implementación sea efectiva.
Muchas leyes demoran mucho en llegar a la realidad de todos los días, para cambiar las cosas, porque no se implementan de forma adecuada.
¿Consideras que el sistema de agrotóxicos tiene directa relación con ese modelo de esclavitud infantil y en general?
— El sistema de cultivos con agrotóxicos o agroquímicos, no creo que esté vinculado al trabajo infantil. Creo que daña y es un agente dañino para quien cosecha, incluso para quien, sin la debida preparación, hace el riego y utiliza estos herbicidas.
Creo que los pone absolutamente en riesgo y está demostrado ampliamente que producen cáncer. Hay un juicio muy importante en Estados Unidos que obligó a la empresa Monsanto, que ahora es de Bayer, a indemnizar por una suma multimillonaria a un encargado de una escuela que durante 30 años utilizó herbicidas para controlar el crecimiento de los cultivos en el parque de la escuela. Así que en esto ya no hay discusión, no solamente provocan daño a las personas que trabajan en la cadena de producción o de suministro, sino a la población en general.
Estamos teniendo un problema enorme con el uso de los agroquímicos, pero me parece que no se vincula con el trabajo infantil o con la pobreza.
Más allá de eso, si uno mira cómo impacta en la utilización de paquetes, su serie de paquetes de semillas y sus herbicidas modificados genéticamente para que prosperen, creo que todos conocemos lo que sucede hoy con los agricultores. Por ejemplo, en el cultivo del algodón en India hubo 60/64 mil suicidios de dueños de establecimientos productivos porque a causa de la utilización de paquetes de semillas con herbicidas, perdieron sus establecimientos, sus granjas; y en Brasil la cifra de 16 mil.
Así que la problemática del agrotóxico y las semillas genéticamente modificadas creo que la sabemos todos. También el avance dañino que tiene la sobreproducción de alimentos. Pero ese es otro tema.
Nosotros trabajamos el tema de trabajo infantil en la cosecha de la yerba mate y de otros productos de la Argentina.
¿Si toda Argentina consumiera yerba agroecológica a la que pudiéramos hacerle seguimiento a la huella, estaríamos más cerca del objetivo de dar un giro a una nueva realidad o sería una fantasía pensarlo?
— En el tema de la yerba mate, específicamente que nosotros que estamos abocados a erradicar el trabajo infantil de todos los cultivos de la Argentina, que es de lo que va este proyecto de ley, creo que no, no sería una fantasía.
Nosotros empezamos un poco antes de que apareciera la idea de las etiquetas negras en los envases. Vimos cómo se desarrolló esa idea, cómo avanzó en la sociedad y después cómo fue tomada por el Congreso de la nación y se aplicó. Esto se copió de Chile. En Chile el tema de las etiquetas negras había prosperado muchísimo, también de quitarle colores a los paquetes de dulce que consumen los niños para evitar la atracción por los colores.
Me imagino que cuando arrancó esto, teniendo en cuenta que la industria de la alimentación es muy poderosa en el mundo, ni hablar en Argentina y en Chile, me parece que uno podría verlo como algo imposible. Pero hoy tenemos etiquetas negras en la góndola, van copando las góndolas. Estas etiquetas que nos indican claramente en forma individual para nosotros qué sustancias tienen en exceso para que podamos elegir consumirlas o no.
¿Por qué no podríamos tener una etiqueta? Creo que la diferencia en esto radica en que cuando yo elijo un producto, cuando un producto tiene una etiqueta negra me dice qué es lo que vamos a consumir mi familia y yo. Puedo decidir. Pero si yo tengo una etiqueta que habla sobre el trabajo infantil, lo que va a suceder ahí es que la persona, al consumir un producto identificado libre de trabajo infantil estará ayudando a otro, ya no es una cuestión personal, es una cuestión de poder hacer algo por el otro. Simplemente eligiendo comprar.
Me parece que las personas naturalmente, nos ayudamos, somos seres sociales y necesitamos unos de los otros. El tema es ordenar las cosas, tener una buena comunicación para que se entienda que lo que estamos ofreciendo como oportunidad social y creer que los cambios son posibles.
Nos preguntamos cómo podemos ayudar a Sueño para Misiones a cumplir objetivos.
— De hecho que un medio tan prestigioso como ustedes nos pidan opinión, nos pregunten, nos entrevisten, es ya de gran ayuda, porque esto permite que la problemática que se esconde detrás del cultivo de la yerba mate, queda expuesta y cuando nosotros vemos, podemos sentir este tema de «ojos que no ven corazón que no siente».
Al enterarse de que detrás de algo que amamos como la yerba mate, el mate que consumimos en familia, solos, con amigos, que es un puente y vínculo entre las personas que amamos o queremos o con las que estamos vinculadas; tiene trabajo infantil. ¿Qué podemos hacer para cambiarlo? me parece que eso es una ayuda invaluable.
Queremos compartir la página de peticiones para que este proyecto de ley se trate, tiene más de 160 mil firmas y sigue creciendo constantemente https://www.change.org/p/yerba-mate-sin-trabajo-infantil-mintrabajoar-vsiley-albor60534823-diproxanareyes-carlosheller
¿Qué le dirías a las personas en general que recién se están enterando de todo lo que hay detrás de algo tan tradicional que amamos como el Mate?
— Que se informen y que tomemos conciencia de que el mate, es parte de nuestra vida, no puede tener trabajo infantil y trabajo forzoso detrás, y que así como nosotros construimos esta desigualdad, tenemos el deber y la oportunidad de desarmar eso que construimos y armar algo mejor que beneficia a todos los que están involucrados.
No hay que olvidarse que el mate es la infusión nacional de Argentina a partir del año 2013. Votado como ley en la Argentina. El mate es la infusión que más se toma en Argentina, después del agua potable la sigue el consumo el mate, son 100 Litros de mate por año por persona.
Si lo pensamos, es casi una obligación para nosotros transformar esto en algo positivo y no ocultar que detrás del mate haya pobreza y trabajo infantil. Queremos que la gente se entere de esto y darle la oportunidad de que se exprese a través de la plataforma y/o siguiéndonos también en redes sociales.
El pasado 12 de Junio, Día Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil, Jorge Kordi, con el proyecto Sueño para Misiones, estuvo en el Congreso de la Nación en una reunión específica para poder hablar sobre el trabajo infantil en Argentina.
— Fue difícil llegar hasta acá, porque fue difícil también decir: «che, vos amás al mate pero decís que tenes trabajo infantil y trabajo esclavo». Es duro reconocerlo, especialmente para los Misioneros que se sienten representados acá. Duele cuando escuchamos que el mate tiene trabajo infantil.
Yo soy un activista… Hace diez años que siento dolor y pensaba cuando vine acá, qué comparto.
Empecemos por quien no está. Fernando Piñeiro, Fernando tenía 13 años, se levantó a las 4 am para ir a trabajar porque había dejado la escuela, se subió a un camión destartalado, que andaba sin frenos, provisto por una empresa yerbatera. En una picada, fallaron los frenos, había 14 niños en ese camión y algunos lograron saltar. A Fernando su papá lo abrazó para protegerlo, pero ninguno de los dos sobrevivió. Estuvieron agonizando ocho días en el hospital.
Es la voz que falta. Es la voz de los que mueren en el yerbal, en la ruta… Es lo que pasa en los yerbales.
En el año 2010 en Misiones, en diez meses, fallecieron 206 niños por desnutrición.
Te invitamos a ver el documental y a sumarte a la campaña #matesintrabajoinfantil A mi también me gusta el Mate, pero sin trabajo infantil.
Les recordamos que pueden sumar su firma a peticiones Change.org/hilorojo También puedes ayudar donando https://donaronline.org/sueno-para-misiones/libres-de-trabajo-infantil?preview=true Y es de gran ayuda difundir esta información para llegar a más personas 🧉💚
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